luns, 17 de decembro de 2018

CHEGOU O NADAL CARGADIÑO DE AVENTURAS!!!


Ao pasar diante da biblioteca parade na preciosa estantería que preparamos para vós!!! Nela atoparedes novidades literarias moi interesantes para ler no Nadal. Están organizadas por niveis, só tedes que mirar no que vos corresponde. 
De todos os xeitos, na biblioteca hai moitas aventuras agardando por ti e sempre sempre haberá alguén que pode axudarche a atopar o libro que buscas. 

NON MARCHES SEN A TÚA AVENTURA!!!

Hace frío...., de Victoria Freitas


Hace frío, una niebla espesa tapa el final de la calle y se escuchan ladridos de perros en la distancia.
Es de noche y la única compañía es la de las pocas farolas que iluminan el lugar en un intento de restarle protagonismo a las estrellas; es la forma perfecta de despejar mi mente después de un día ajetreado.
Es entonces cuando escucho unos pasos a metros detrás de mí. Por puro instinto, empiezo a caminar más rápido de lo normal, pero los pasos no cesan. Al contrario: aumentan su velocidad y se acercan cada vez más. No es que tenga miedo, puesto que no soy un cobarde ni nada parecido. Pero a tales horas, no debería haber nadie en la calle...
Todo se para de repente: los perros se callan, los grillos ya no grillan y los pasos se detienen. Empiezo a creer que todo ha sido una alucinación causada por el cansancio, o quizás por el estrés del trabajo.
Pocos segundos más tarde, cuando creía que todo había terminado, escucho una respiración lenta detrás de mí que me pone los pelos de punta. Intento girarme, pero el miedo se apodera de mi cuerpo y me quedo paralizado.

Victoria Freitas, 1º de E.S.O.

luns, 10 de decembro de 2018

Jugar al escondite, de María Penín

Ella tenía una pequeña tienda en el pueblo. Vendía muchas cosas: jabón, aceites, botones... Todo hecho a mano. Los precios eran altos, pero la gente siempre decía que la buena artesanía se pagaba cara. ¡Y tanto!

Primero los capturaba cuando salían del colegio y los encerraba en su sótano, del cual nadie conocía la existencia. Les decía que iban a jugar al escondite. Una vez en el sótano, los mataba y aprovechaba cada parte de sus cuerpos.


Ese era el secreto de sus productos. ¡Pobres, siempre caían en su trampa!